La terapia de luz LED de fotones es una innovación moderna para el cuidado de la piel que va más allá de la luz roja sola. Aprovecha múltiples longitudes de onda para ofrecer beneficios específicos basados en preocupaciones de la piel. Desde el tratamiento del acné hasta el alivio del dolor, esta terapia es ideal para aquellos que buscan versatilidad en un dispositivo.
A diferencia de la terapia de luz roja de longitud de onda única, la terapia LED de fotones incorpora un espectro de luz terapéutica, cada una con beneficios únicos:
Luz azul (405–420 nm): Mata bacterias que causan acné.
Luz roja (630–700 nm): Estimula el colágeno, promueve la curación.
Luz ámbar/amarilla (570–590nm): Reduce el enrojecimiento, admite el drenaje linfático.
Luz de infrarrojo cercano (800–900 nm): Penetra profundamente para aliviar el dolor articular y muscular.
Modos de tratamiento personalizables: Cambiar fácilmente las longitudes de onda dependiendo de su piel’S condición.
Trata el acné & Cicatrices: Las luces azules y rojas funcionan sinérgicamente para una piel más clara.
Alivia el dolor & Reduce la inflamación: La luz infrarroja respalda el alivio del dolor crónico.
Acelera la reparación de la piel: Ideal para la recuperación posterior al tratamiento o el rejuvenecimiento general.
Photon LED es perfecto para usuarios con múltiples objetivos de la piel—como el acné más antienvejecimiento—O aquellos que manejan preocupaciones de bienestar facial y físico. Su versatilidad lo convierte en una poderosa adición a cualquier rutina de cuidado de la piel en casa.
Propina: Usar 3–5 sesiones por semana, 10–20 minutos cada uno y ajuste la configuración de longitud de onda en función de sus necesidades inmediatas.