La terapia de luz roja, también conocida como fotobiomodulación (PBM), ofrece longitudes de onda específicas de rojo e infrarrojo cercano (NIR) (típicamente 600–850 nm) a los tejidos del cuerpo. Estas longitudes de onda estimulan la actividad mitocondrial, ayudando a las células a producir más ATP—Especialmente importante en órganos que demandan en energía como el cerebro.
El cerebro consume una porción significativa del cuerpo’S Energía. Al activar la citocromo c oxidasa en las mitocondrias, la luz roja aumenta la producción de ATP, lo que lleva a una mejor función neuronal, claridad mental y resistencia cognitiva.
RLT puede suprimir las citocinas proinflamatorias y mejorar las defensas antioxidantes—Crucial para combatir afecciones como el Alzheimer o la niebla cerebral. Los estudios en animales han demostrado una reducción de la neuroinflamación después de la exposición al infrarrojo cercano.
El mejor flujo sanguíneo ofrece más oxígeno y nutrientes al cerebro. Algunos estudios indican que RLT también puede respaldar la formación de nuevas neuronas en regiones cerebrales relacionadas con la memoria como el hipocampo.
A 2013 Neuroimagen El estudio informó una mejor memoria y tiempos de reacción más rápidos en adultos sanos después de la terapia NIR. Se han observado resultados similares en las poblaciones militares y deportivas bajo un alto estrés mental.
La luz roja puede influir en la química del cerebro al afectar las vías de serotonina y dopamina. Un ensayo clínico de 2018 mostró que los pacientes con depresión experimentaron mejoras del estado de ánimo después de sesiones de luz de infrarrojo cercano consistentes.
La evidencia preliminar sugiere que RLT podría ayudar en la reparación neural después del accidente cerebrovascular. Un estudio de 2021 publicado en Ataque encontraron mejores resultados funcionales en pacientes que recibieron terapia de luz transcraneal.
Dispositivos dirigidos : Use cascos RLT transcraneales o diademas para la aplicación directa.
Rango de longitud de onda : 600–La luz de 850 nm se usa más comúnmente.
Duración de la sesión : 5–20 minutos, 3–5 veces por semana.
Áreas de aplicación : Frente, templos o cuero cabelludo superior para una penetración más profunda.
Las clínicas profesionales y los centros de bienestar ofrecen cada vez más sesiones de RLT centradas en neuro, pero también están disponibles dispositivos de uso doméstico de alta calidad.
La terapia de luz roja es generalmente segura cuando se usa correctamente. Efectos secundarios potenciales—tales como dolores de cabeza suaves o fatiga visual temporal—son raros. Sin embargo, todavía se están estudiando los efectos a largo plazo, y se necesitan más ensayos clínicos para confirmar la dosificación y los protocolos óptimos.
La terapia de luz roja presenta una frontera emocionante en la mejora cognitiva. Si bien no es un reemplazo para un sueño saludable, nutrición y ejercicio, puede ofrecer beneficios significativos para aquellos que buscan enfoque más nítido, mejor memoria y neuroprotección.
A medida que la investigación continúa, RLT podría convertirse en una herramienta ampliamente aceptada en las rutinas de bienestar cerebral—Especialmente para adultos envejecidos o para aquellos bajo estrés mental crónico.